El TIGRE de Sara se guardó el traje, la galera y el bastón para la última función en el Coliseo. Gran exhibición del Matador ante un rival que cuidó jugadores, pero que sigue siendo un equipo respetable y con un gran entrenador. Enorme triunfo para despegarse del fondo.
TIGRE justificó en todo momento el resultado, tanto en igualdad de condiciones como con un hombre de más. San Lorenzo se replegó y lo dejó jugar. Menossi y Castro? una sociedad impecable. Prediger? Un león en la mitad de cancha. Rojas? un espectador de lujo bajo los tres palos.
La clave estuvo en que ningún jugador bajó de los 6/7 puntos. De ahí, para arriba. El nivel en general fue superlativo y constante. No hubo baches ni altibajos. Ojalá no haya sido una casualidad y que a partir de ahora TIGRE muestre una nueva cara en la Copa de la Liga.
La gente se deleitó en las tribunas y se movió al ritmo del equipo en la cancha. Dos victorias al hilo después de mucho tiempo es motivo suficiente para festejar y volver a tener un poco de optimismo mirando el futuro cercano. Vamos TIGRE que esta la levantamos entre todos.